Disparidad (post-Party)
La fiesta del sábado tuvo un estilo algo setentero, con base en el alcohol y la marihuana. Supongo que las fiestas de la gente de 20 años son más pastilleras. Pero aquí los porritos y los cubatitas hacían estragos. Y algunos acabaron ciertamente tocados. Estuvo muy bien aunque me quedó cierta sensación de no haber hablado todo lo que me pedía el cuerpo. Conocía a todo el mundo...era el mundo de jap. Su trabajo, su familia, sus amigos de toda la vida y algún ligue reciente (al que me presenté todo suelto para soltarle que lo "sabía todo" en un alarde fruto de los nervios aunque no viniera a cuento). A alguna gente hacía un montón que la veía, así que tocó la típica conversación de update en 10 minutos: el apartamento en el que vivo ahora, el trabajo, la familia, el noviete... Todo rápido, sin implicación pero sí con sustancia. Me quedé hasta el final, como un campeón, hasta que dejé arropado a jap en el sofá, con todo lo que pudiera necesitar bien a mano.
Balance final muy positivo, aunque el fallo claro estuvo en la música. Si no la llevas pre-grabada te vuelves loco. Con gente tan dispar, nunca encuentras un cd que convenza a todo el mundo. Y poca Fangoria... fatal, con la ilusión que me hacía presentar el nuevo disco.