domingo, 31 de julio de 2022

Pabellón Serpentine 2022

Fieles a las fijaciones de David, en nuestro último día en Londres, el sábado, fuimos a ver el Pabellón de verano de la Serpentine Gallery. En esta ocasión es un cilindro, con aires de Panteón. Todo en negro y absolutamente cerrado, con excepción de los accesos y la claraboya del centro. En el interior de la galería había una exposición sobre alienígenas a cargo del artista francés Dominique Gonzalez-Foerster. Prometía mucho pero nos quedamos sin ver lo más interesante, que era una sala con realidad virtual, pero que tenía una larga lista de espera. 

Más allá de la Galería Serpentine y su pabellón efímero de verano, nos impresionó atravesar Kensington Gardens y Hyde Park y ver lo seco que está todo. Nunca lo habíamos visto así. Parecían campos de Castilla. Da miedo.  


sábado, 30 de julio de 2022

Concierto de Lady Gaga en Londres

Era la cuarta vez que veía a Lady Gaga en concierto y la que menos me ha gustado. Claro, que todo es relativo y la inevitable comparación es el problema que tiene ver varias giras del mismo artista. A Javier y Carlos, que la veían por primera vez, les encantó. 

El show, parte del Chromatica Ball Tour, es impresionante, por dimensiones, por pirotecnia y por parafernalia visual. Sin embargo, el ritmo es muy irregular. Está dividido en 5 actos y entre ellos hay videos introductorios muy largos y muy oscuros. Es todo demasiado conceptual. Hay que leerlo como parte de su transformación desde la oscuridad a la luz, o desde la parálisis provocada por su enfermedad de fibromialgia a la renovada vitalidad. En cualquier caso, gracias al concierto descubrí algunas canciones nuevas y, entre ellas, mi preferida, Free Woman, que canta entre el público en directo, mientras se traslada de un escenario a otro. 

El concierto fue en el Tottemham Hotspur Stadium uno de esos recintos enormes pero muy modernos. Lo inauguraron en 2019 y me gustó mucho la arquitectura. Está al norte de Londres, a unos 10 km de dónde teníamos el hotel, en el barrio de Shoreditch, una zona que nos gusta mucho y en la que ya nos habíamos quedado una vez.  Tardamos 2 horas en volver, vagando como errantes por la ciudad, igual que muchos otros miles de personas, hasta que conseguimos subir a un autobús. 




viernes, 29 de julio de 2022

Pedro Paricio en Halcyon Gallery

Estamos en Londres, con Carlos y Javier, para ver un concierto de Lady Gaga. El viaje ha sido una oportunidad para ponernos al día y descubrir algunas nuevas propuestas culinarias y artísticas. 

En el apartado restauración, cenamos los cuatro en Tattu, un nuevo restaurante chino en Tottenham Court Road, en el roof top de Outernet. Nos recordó a la  reciente experiencia en La Plume de París, todo muy "cool", mezclando un gran espacio, cuidado diseño y comida china, con vistas y elevados precios. 

Más gratificante fue la experiencia en Ikoyi, el restaurante con dos Estrellas Michelin, en el que trabaja como manager Dominic, el amigo polaco de David, que nos acompañó durante toda la comida. Tienen tan solo un puñado de mesas, servicio constante y comida deliciosa. 

En el apartado artístico, descubrimos al artista tinerfeño Pedro Paricio en Halcyon, una de las galerías de New Bond Street. Ya lo conocíamos, o eso creemos, por esos colorines tan característicos en sus cuadros. La exposición de Londres se llama "Tradition" y en ella hace una reinterpretación de cuadros clásicos de todos los tiempos, desde Vermeer a Dali, pasando por Hockney. Nos gustó mucho. 





jueves, 28 de julio de 2022

Polisomnografía

He pasado una noche en el hospital para realizar un estudio de sueño. Buscan saber cómo respiro y cómo funciona mi corazón por la noche, por posible apnea. Es una prueba que me había pedido la neumóloga hace 3 meses y que he ido demorando por trabajo y viajes. 

El proceso de la prueba es algo intimidante. Múltiples electrodos en piernas, caja torácica, cara y cráneo. Tienen además que hacer unos pequeños raspados en la piel para que los electrodos transmitan bien. Toda la noche se graba en cámara. No es de extrañar que con toda esa parafernalia no consiguiera quedarme dormido. Acabé tomándome una pastilla, tras 3 horas de intentos. Así, al menos, tendrán algunas horas de sueño inducido para analizar. Resultados dentro de un mes. 

martes, 26 de julio de 2022

Turismo en Madrid en julio

Hemos tenido a Mihaela en casa unos días.  Es el perfecto ejemplo de "amiga globalizada": rumana de origen, fuimos compañeros de trabajo en Londres, después se trasladó a Singapur dónde la visitamos y ahora está viviendo en París. Ha realizado una de esas transformaciones profesionales sorprendentes: dejó el mundo corporativo de Recursos Humanos y ahora se dedica a la psicología clínica. Es fascinante conocer la casuística de ansiedades, depresiones y trastornos varios que rodean su vida. 

Aunque han sido días de calor extremo, hemos hecho algo de turismo, combinando paseos, alguna exposición en el Retiro y alguna iglesia, todo en plan muy relajado. La mayor parte del tiempo lo hemos pasado charlando, comentando casos clínicos y ... comiendo y cenando como si no hubiera mañana.


jueves, 21 de julio de 2022

Concierto de Rosalía en Madrid

Hemos asistido a uno de los dos conciertos de Rosalía en Madrid, en el Wizink Center. Era la segunda vez que la veíamos. La anterior fue en París con el Mal Querer. Ya entonces nos sorprendió el fanatismo del público, y esta vez ha sido aún más impactante porque, a priori, el último album, Motomami, es bien extraño.  

Me gustó el concierto más de lo que esperaba porque no conocía apenas el último album y esa mezcla absoluta de estilos (reggaeton, bachata, samba, flamenco, pop...) me supera un poco. La gente, sin embargo, estaba muy entregada y lo mismo disfrutaba una balada aflamencada que uno de esos trepidantes ritmos urbanos con giros inesperados. Ella es una artistaza sin lugar a dudas, con unas cualidades vocales excepcionales y mucha empatía con el público. Fue muy impresionante vivir la versión en directo de La noche de anoche porque ella baja al foso y va acercando el micrófono a los fans que cantan emocionadísimos la canción (yo no la conocía, aunque es una colaboración muy famosa con el rapero Bad Bunny). 

La mejor forma de acercarse al disco Motomami es ver el análisis de Jaime Altozano con la propia Rosalía dónde se desgrana la filosofía y la técnica detrás de los distintos temas. Mi canción favorita es Sakura, una preciosidad de música y letra sobre lo efímero que es todo, incluida su fama de pop star. 



martes, 19 de julio de 2022

Magdalenas en agua

He pasado los últimos 4 días en Vigo con Juan. Viajamos en coche desde Ribadesella el viernes pasado, con paradas en Tapia de Casariego, un pueblo con mucho encanto, y en la Playa de las Catedrales que vimos sólo desde arriba, como la vez anterior

Esas paradas turísticas en ruta fueron los últimos coletazos de las vacaciones asturianas. La estancia en Vigo, en cambio, tuvo poco de vacaciones porque la nueva realidad geriátrica de mi padre se impone constantemente.  Aunque el hombre tiene algunos momentos de casi lucidez, sobre todo si cuenta alguna aventura del pasado, en general se le nota francamente mal. 

Ha habido 3 incidentes duros de observar durante este viaje: 1/  ponerse la camiseta de tirantes por encima del pijama, en lugar de por debajo; 2/ intentar encender la TV accionando su cartera abierta en lugar del mando a distancia; y 3/ empeñarse en tomar magdalenas y galletas, mojadas en agua a falta de leche, al final de la cena porque debió pensar que estaba desayunando.

Ayer fui con mi madre a hablar con el médico de familia. Parece que todo está en marcha: una asistente social evaluará esta semana el contexto familiar y un geriatra verá a mi padre a finales de agosto. Con los resultados de esas dos citas, decidirán el grado de asistencia que se puede proporcionar.  

Se avecinan tiempos muy complicados porque a la creciente dependencia de mis padres se suman otros problemas de salud en el entorno familiar. Tras el paréntesis del verano, tendré que organizarme para ir a Vigo más a menudo. 



viernes, 15 de julio de 2022

Acantilados del Infierno

Hemos probado las motos de agua en Ribadesella y ha resultado muy buen plan. Son recorridos de una hora, en plan excursión acuática. Un guía te lleva hasta una zona de cuevas y acantilados, conocida como Acantilados del Infierno, con muy buena vista a toda la costa. Hay dos empresas que las hacen. Nosotros escogimos la más pequeña y resultó un acierto porque fuimos solos con el guía. 

La experiencia de la moto en si misma ha sido algo tensa, pero gratificante. Ese mar Cantábrico abierto impone respeto y aunque no era un día de muchas olas, notas la fuerza del mar contra la moto. Tenía miedo a que se cayera Juan, que iba detrás, y no enterarme. 

Además de la excursión con las motos, una de las tardes fuimos también a ver los Acantilados del Infierno desde arriba. Fue todo un descubrimiento porque no conocíamos esa zona de Ribadesella. Hay un sendero litoral que conecta con los Bufones de Pría, en los que sí habíamos estado. El sendero completo son algo más de 5 km. No nos dio tiempo a hacerlo completo, pero nos encantó el tramo que vimos y yo me he quedado con la copla para hacerlo completo en algún otro viaje. 


jueves, 14 de julio de 2022

Atardeceres en Vega

Las vacaciones asturianas llegan a su fin. Han sido las más largas hasta la fecha, 8 días, superando aquella  vez que veníamos para 4 días y nos acabamos quedando una semana. La particularidad de este viaje ha sido el tiempo tan espectacular y constante, y la regularidad de ir a la playa a diario. Me he bañado todos los días, la mayoría por las mañanas, en esa franja de 10 a 12 cuando apenas hay gente y el sol ya calienta pero aún no es muy intenso. También ha habido un par de baños al atardecer en la Playa de Vega, con puestazas de sol. 

Tengo que remontarme más de una década para encontrar unas vacaciones tan playeras. Si aquella vez hablé de veranazo gallego, esta vez tengo que hacerlo de un auténtico veranazo asturiano. En 2022 se ha producido la alineación perfecta: buen tiempo, disponer de los días y no viajar con David, ya que a él no le gusta mucho la playa, y mucho menos el agua fría.  



martes, 12 de julio de 2022

Playa de Torimbia

Había estado en dos ocasiones anteriores, pero ambas en plan turista, no bañista. Esta vez, en cambio, disfruté de la experiencia completa de Torimbia, que incluye las penalidades de acceso. 

Torimbia es una playa espectacular desde cualquier punto de vista, por su forma, por el paisaje totalmente virgen y por la calidad del arenal y de la zona de baño, casi una piscina, muy plana y con oleaje domesticado. Además, es una playa nudista al 80%, mientras que nuestra playa habitual, la  de Vega, sólo lo es al 10%. Todo parecen ventajas. La única pega es una larguísima pista de acceso peatonal con bastante pendiente. Intentar atajar por el monte es casi peor porque el sendero es muy empinado y está en muy mal estado así que te arriesgas a una torcedura de tobillo o esguince. 

Al final de la pista de acceso hay un chiringuito, la única prueba de civilización en algunos kilómetros a la redonda. En el extremo opuesto de la playa, mirando al mar a la derecha, hay un segundo sendero pero no da a la zona de aparcamiento sino a la vecina playa de Toranda (dos últimas fotos), con lo cual el rodeo es considerable. Juan y yo cometimos ese error y llegamos al coche agotados. Eso sí, disfrutamos de las vistas y todas las penalidades quedaron compensadas por todo el ejercicio que hicimos y por el buen rato de baño que habíamos pasado en Torimbia.