viernes, 30 de agosto de 2013

Mini vacaciones gallegas

Mis vacaciones gallegas de este año han sido especialmente cortas, no han llegado a una semana, y tardías, casi a finales de agosto. Este año está siendo de mucho picoteo vacacional y no tenía más días disponibles. He ido cogiéndome días sueltos aquí y allá, entre escapadas Mandarin, viaje a Montreal, Ribadesella y algún otro viaje aún por venir. En cualquier caso, pasar unos días entre Bon (en la Ría de Aldán) y Vigo, es un clásico de mis veranos y no recuerdo un año en el que me haya saltado esa cita familiar. 

Han sido días relajados, de tertulias largas, en las que me he esforzado por participar en las conversaciones de sobremesa. A medida que mis padres se hacen más mayores, voy valorando de forma distinta el tiempo que pasamos juntos y su capacidad para nuclear alrededor al resto de la familia. Estos días han servido también para restaurar la relación con Ana, que había ido acumulando tensiones y rarezas desde nuestro extraño verano anterior. Finalmente, he leído, a ratos con voracidad. Además de acabar un par de libros que llevaba de Londres, he leído Tokio Blues de Haruki Murakami y El Gran Gatsby de Scott Fitzgerald. Los dos me han gustado bastante. Aunque son obras que no dejan muy buen cuerpo, al menos están muy bien escritas, con personajes memorables y numerosas frases y reflexiones vitales dignas de ser subrayadas. 


miércoles, 21 de agosto de 2013

El Hombre de Wilmington y Beachy Head

Campos de trigo dorado, una colina verde con la hierba bien segada y una enorme figura humana delineada en blanco. Se llama Hombre Largo de Wilmington y es uno de los muchos "geoglíficos" que hay en Inglaterra. Algunos datan de la Edad de Bronce, otros, como este, de la Edad Media, de una fecha indefinida entre los siglos XIV o XV. No está muy claro su propósito, pero ese punto mágico me hace ya querer localizar y visitar otras figuras blancas similares que andan por ahí perdidas en la campiña inglesa.  

El Hombre de Wilmington está muy cerca del acantilado de Beachy Head, que es el otro extremo de  los acantilados de las Siete Hermanas que nos habían maravillado hace unas semanas. De nuevo esa sensación de vértigo y belleza extrema, las paredes blancas, las rocas, el mar azul y un pequeño faro blanco y rojo. Un escenario mágico y trágico a partes iguales porque abundan las cruces recordando los numerosos suicidios. Más de 20 cada año, uno de los sitios más populares en todo el mundo. Hay patrullas de prevención día y noche y carteles con una suerte de teléfono de la esperanza para que te lo pienses dos veces. Creo que es un sitio precioso para morir, pero de otra manera. Tal vez relajado mirando al mar en el horizonte y adormeciéndose poco a poco, despidiéndose de las cosas bonitas y siendo abrazado por la espalda por algún ser querido. Ojalá pudiéramos elegir la forma de morir. 





lunes, 19 de agosto de 2013

Viaje al País 1066

Hemos vuelto al sur de Inglaterra, concretamente a Hastings, desde dónde hemos explorado el llamado 1066 Country, una denominación turística que agrupa los lugares del condado de Sussex Oriental relacionados con la Conquista normanda de Inglaterra en el año 1066. La historia nos la sabíamos por el maravilloso tapiz medieval que vimos en Bayeux, en Francia y básicamente consiste en que Guillermo el Conquistador, el Duque de Normandía, cruzó el Canal de la Mancha con 500 barcas y unos miles de hombres y en la Batalla de Hastings derrotó a los ingleses y mató a su rey. Fue la única vez en la historia en la que Inglaterra fue invadida y conquistada y eso cambió su historia para siempre. Se introdujo francés en la Corte, empezó el feudalismo, se construyeron castillos... Toda una revolución para los primitivos anglo-sajones que antes de ser invadidos aún tenían esclavos. Total, que la fecha de 1066 es la típica que se saben todos los alumnos aquí, parecido al 1492 en España. 

Hastings es una ciudad que tiene su punto: un pequeño y cuco casco viejo, restos de un castillo, restos de un "pier" (es decir, uno de esos muelles victorianos como el de Brighton), una playa de piedrolos inmensa y, atención a la curiosidad, la mayor flota pesquera basada en playa de Inglaterra. Es decir, que no hay puerto como tal, sino que los barquitos de pesca se remolcan a la playa con tractores y allí se quedan todos varados. 

El lugar de la batalla famosa de 1066 queda hacia el interior y se llama... Battle.  Allí se pueden visitar los restos de una Abadía, muy fotogénicos, y el campo de batalla en el que se enfrentaron los dos ejércitos. El escenario (segunda foto) permite imaginarse los acontecimientos: una colina en la que estaban los sajones parapetados tras escudos (sólo soldados de a pie) y una planicie desde la que subían a atacar los normandos con arqueros, infantería y caballería (un ejército más sofisticado).

Nuestra excursión por la zona se completó visitando el Bodiam Castle, un castillo totalmente rodeado por un foso enorme, casi más bien un lago. Super bonito y con muchas actividades para niños (así que no nos quedamos mucho tiempo). Acabamos nuestro circuito en Rye, un pueblecito medieval muy cuco. 

Fin del día de batallitas. 



jueves, 15 de agosto de 2013

Hábitos de lectura

Volvemos a tener internet en casa desde hace algo más de una semana. Estamos contentos de re-conectarnos con el mundo pero también decididos a preservar los hábitos de lectura que han vuelto a esta casa después de muchos años. De hecho, nos hemos puesto la regla de que a las 22:30 se corta la conexión a internet para que nos dé tiempo a leer antes de irnos a la cama. Queremos aprovechar el tirón del último mes y medio en el que dbt se ha ido enganchando a un libro tras otro y yo he empezado  a retomar libros que tenía pendientes desde hace años. 

He descubierto una auténtica joya literaria en "Nunca me abandones"de Kazuo Ishiguro. Se trata de un regalo que me hicieron en un cumpleaños memorable hace 5 años y aún no me explico como he podido vivir sin leerla todo este tiempo. Me chifla todo: el estilo de la narración, los personajes, la pequeña magia cotidiana, el misterio que lo envuelve todo, la sensibilidad y belleza con la que se describe cada "escena-momento"... Desde su lectura cada barco varado que veo en la costa inglesa me recuerda la historia. Es de las mejores novelas que he leído en mi vida.  Un autor a explorar en profundidad. 

También he leído "Amores en Fuga", un libro de relatos de Bernhard Schlink, que me ha gustado a medias. Algunos relatos están bastante bien y otros tienen historias bastante flojitas o previsibles. 

Ahora tengo a medias otros dos libros. Uno de ellos es "Vidas Post-It", unos micro-relatos de Iolanda Züñiga, que ocupan de 1 a 3 páginas cada uno y apuntan muy bien. Me está costando volver a leer en galego pero espero superarlo como paso previo a volver a leer en portugués (idioma en el que tengo una buena ristra de libros pendientes). El segundo libro que leo estos días es "El islamismo contra el islam" de Gustavo de Arístegui, el que fue portavoz de exteriores del PP. Un libro flojito, sobre todo después de haber leído recientemente otras obras sobre el tema mucho mejor documentadas. En cualquier caso, las recientes lecturas sobre el Islam me están ayudando a poner en perspectiva lo que está ocurriendo estos días en Egipto. 


domingo, 11 de agosto de 2013

Estreno de terraza

Este fin de semana hemos hecho paréntesis en nuestros recorridos por la costa sudeste inglesa para quedarnos en Londres y darle un nuevo empujón a la organización de la casa, ya que aún quedan  cosas por el medio después de la mudanza. El mayor avance ha sido acercarnos a Ikea y venirnos con una mesa y un par de sillas para la terraza. No la hemos podido aprovechar el mes de julio, que ha hecho un tiempo espléndido, pero nos queda la esperanza de sacarle algún partido durante agosto. Por lo pronto ya hemos hecho algún desayuno y aperitivo al atardecer, y se está de maravilla. 


sábado, 10 de agosto de 2013

Victoria & Albert Museum

He tenido mi primer contacto con el Victoria & Albert Museum. Había visto el edificio por fuera en numerosas ocasiones, porque es una mole victoriana inmensa, situada en South Kensington, pero no me había animado a entrar, convencido de que eso de las Artes Decorativas y el Diseño no era lo mío. No hay nada como tener prejuicios para acabar sorprendido... Me parece un básico de Londres desde ya mismo. 

Parte de las salas estaban cerradas el viernes por la tarde porque abren hasta las 10 de la noche pero a medio gas. Lo que he visto me ha dejado maravillado, sobre todo la escultura medieval europea. Aunque sólo fuera por ver el interior del edificio merece la pena. Además tiene un patio super animado, que funciona como una auténtica plaza pública, ya que el acceso es gratuito. Terraza de copas, pianista, gente en plan merienda-picnic, niños jugando en la fuente-estanque... Ambientazo total.


jueves, 8 de agosto de 2013

Royal Pavilion en Brighton

En el apartado cultural la visita obligada en Brighton es el Royal Pavilion, una mezcla de cúpulas indias y minaretes con interior chino. Toda una mezcolanza de estilos al gusto de un principe inglés, luego rey, Jorge IV, que lo hizo construir a principios del siglo XIX. En realidad el despegue de Brighton como potencia turística en el sur de Inglaterra debe mucho a este palacete. Lejos de parecernos hortera, el batiburrillo nos gustó mucho, especialmente el interior, en el que no se pueden hacer fotos. Abajo se puede ver la cocina, que por lo visto era lo más avanzado de la época. En lo que eran las caballerizas del palacio está ahora el Brighton Museum, que se despacha rápido porque, salvo un par de cuadros, no tiene demasiado interés. 


lunes, 5 de agosto de 2013

Acantilados de las Siete Hermanas

A una hora en autobús desde Brighton se accede a los Acantilados de las Siete Hermanas ("Seven Sisters Country Park"), que forman parte del Parque Nacional South Downs. Es uno de esos sitios naturales de película, que hacen pensar en la escena de los "Los Inmortales" con "Who Wants to Leave Forever" de banda sonora. De hecho, el paisaje aparece en muchas películas y también es uno de los sitios más populares en el mundo para... suicidarse. Todo muy dramático, pero creo que es de los sitios más impactantes y bonitos que he visto en mi vida. Mucho mejor que los Acantilados de Dover porque el entorno es mucho más natural, sin ferrys al lado y con la posibilidad de bajar a la playa y recorrer el pie de los acantilados. Bellísimo. Repetible.


domingo, 4 de agosto de 2013

Brighton

Hemos hecho escapada de fin de semana a Brighton, un pueblo-ciudad en la costa, a una hora en tren de Londres, menos de 100 km. Es un destino vacacional muy afamado desde que construyeron el "Brighton Pier", un muelle de recreaciones en la época victoriana, a finales del XIX. Es una estructura  increíble, que se adentra unos 500 metros en el mar, sustentado por pilotes de madera que aguantan el peso de un montón de atracciones, incluyendo montaña rusa, coches de choque... Existía un segundo muelle, el "West Pier" pero ahora sólo quedan restos de la estructura, en plan esqueletos frente a la playa. 

Brighton se considera la playa de Londres pero a pesar de que se extiende durante kilómetros a nosotros nos dejó algo decepcionados. Son piedrolos de tamaño considerable así que no hay cuerpo que aguante mucho tiempo tumbado...

Sin saberlo cuando organizamos el viaje, resulta que este fin de semana era el "Orgullo Gay". La ciudad es una especie de Sitges grande, conocida por su alta proporción LGBT. El desfile estuvo normalito, divertido y muy organizado. Empezó a las 11 de la mañana y en una hora ya había pasado toda la cabalgata. Lo que si se notaba después era la aglomeración de gente por todas las calles y plazas. Dimos algunas vueltas y después nos escapamos en autobús a hacer una excursión... para ver acantilados.