Virilidad

Desde hace unos días tengo internet en casa. Lo de bajar al portal se acabó porque le pusieron clave de seguridad a la red inalámbrica que pirateaba. Por las noches, con la novedad, me dan las tantas, entre explorar páginas gays de contactos y chatear por el messenger con amigos incipientes. De entre esas nuevas amistades la más desarrollada es la de un actor semi-famoso y su pareja. El próximo domingo iré con dvt a ver la obra musical en la que actúa. Veremos cómo acaba la cosa; tal vez cenemos juntos.

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Describir tu perfil en la red tiene sus trucos. La clave según mi asesor personal, B(bran), es reducir el texto al límite, que los ciber-gays no son nada leídos, y seleccionar pocas fotos pero buenas. El domingo por la mañana me tiré un buen rato probando ángulos, posiciones, luces. Muy divertido (para hacerlo un día, claro).

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Y luego están los anuncios de las páginas... Siguiendo un banner llegué al mundo de los alargamientos de pene. Y engrosamientos, claro. Multitud de métodos para mejorar tu virilidad y autoestima. Por lo visto todo es posible... desde los aparatos alargadores hasta los ejercicios manuales, las píldoras, las bombas de vacío, la cirujía... No tenía ni idea del mercado enorme que existe. Lo que es vivir en la ignorancia... siempre te pierdes algo.