Crónicas de Reunión
Llevo algunos días leyendo con ilusión e intriga la crónicas de ultramar que envía A(men), desde Isla de la Reunión. Se trata, como él dice, de unas cartas a los amigos que le quedan dónde narra sus aventuras en esta remota isla africana, colonia de Francia. -
Los emails, que van llegando sin periodicidad definida, poseen todos los ingredientes de las grandes novelas de exploración: naturaleza indómita, con cáscadas de película, ciclones repentinos o volcanes que entran en erupción, bloqueando carreteras; fauna tropical compuesta de multitud de insectos y arañas como la de la foto; comidas exóticas, y repelentes, que incluyen mini-peces de ojos saltones; peligros acechantes en forma de tiburones tras la barrera de coral que protege las costas y... aquelarres de sangre a las 4 de la mañana con gallos decapitados correteando en rituales al mejor estilo vudú.