miércoles, 2 de agosto de 2023

Guimarães - Covelinhas

Alrededor del cumpleaños de mi madre, hemos montado unos días de vacaciones en el Norte de Portugal, con ella y con Juan. Nuestra primera etapa fue Guimarães, una ciudad medieval, llena de patrimonio y cuna del país. Yo había estado hace muchos años y tenía muchas ganas de volver. Sin embargo, nuestra visita quedó algo deslucida por la lluvia. Aún así, dimos un buen paseo por el casco histórico y comimos algo. 

Seguimos ruta hasta Vila Real y desde allí, por una carretera bien sinuosa hasta Covelinhas, en el Valle del Duero. El paisaje ya antes de llegar es muy impactante, con laderas llenas de vides y olivos. No esperábamos tanta belleza, ni tantas curvas. 

Nuestra ruta y destino vinieron marcados por una de esas "caualidades Booking". Es decir, encontramos una casa rural mona, y allí que fuimos. La Quinta da Travessa en Covelinhas ha sido todo un descubrimiento de alojamiento. Sólo tienen 3 habitaciones, y las dos que reservamos permiten privatizar un pequeño salón. Entre eso, la piscina, y lo bonito que es el pueblo (o aldea), nos hemos encontrado con un planazo algo inesperado.