sábado, 26 de agosto de 2023

Ola de calor en Ginebra

Esta semana ha sido la peor de todo el verano en Ginebra. Una ola de calor arrancó el martes y duró hasta el viernes, con máximas de 37 grados y mínimas nocturnas de 21-22. Sólo ayudó un poco el hecho de que ya estamos avanzados en agosto y los días son más pequeños. Con todo, la ciudad se tiró al lago y hemos visto las playas y riberas más saturadas que nunca, incluso ya puesto el sol. 

Coincidieron estos días plomizos con la visita de Geni y Candela. No se dejaron amedrentar por el calor e hicieron bastante turismo con David, mientras yo trabajaba. Por la tarde-noche, hemos hecho baños, paseos, cenas y tertulias. Para acabar el día, antes de acostarnos, hemos jugado partidas a Hitster, un juego de mesa que nos regalaron y que consiste en adivinar y ordenar canciones cronológicamente. La tarde del viernes vinieron a buscarme a la oficina y les hice una visita guiada por las instalaciones, con sus numerosas obras de arte y esas vistas al lago que no tienen precio.