Museo de Pablo Gargallo

Hemos visitado un nuevo museo en Zaragoza que nos ha encantado. Está en el centro histórico, cerca del Mercado Central (una de esas maravillas de hierro y cristal, perfectamente renovado y modernizado). El Museo Pablo Gargallo está en un Palacio renancentista, flanqueado por dos estatuas ecuestres (Saludo Olímpico se llaman). En el interior las salas de exposiciones se distribuyen alrededor de un patio precioso cubierto con una moderna cúpula. 

Nos gustaron mucho las esculturas y nos recordaron, inevitablemente al francés Antoine Bourdelle, ambos fueron seguidores de Rodin. Tiene obras en bronce, cobre y hierro y trabajó sobre todo figuras humanas, bustos, desnudos masculinos y femeninos. Uno de esos ejemplos de artistas modernistas que no conocíamos y de los que ahora nos volveremos fans. 

La visita al museo Pablo Gargallo confirma mi teoría de que Zaragoza es una ciudad con equipamientos históricos y culturales de primer nivel. Creo que aunque David es un poco prejuicioso con su propia ciudad, pasito a pasito, visita a visita, va cayéndose de la burra y apreciando mejor lo que tiene en casa. 

Y por cierto, al lado del Museo Gargallo hay una tienda-restaurante gourmet maravillosa, Montal, ideal para tomarse algo en la terraza, comprar cosas de capricho, visitar la bodega (última foto- patio interior) y, supongo que también comer, aunque eso se quedará para una próxima ocasión.