Boda en el Bósforo
Que nadie espere en esta entrada imágenes de harem o de la danza del vientre. Esta fue una boda civil en la República secular de Turquía. Todo su exotismo se reduce al hecho de que se celebraba en un barco en el Bósforo, exactamente entre Europa y Asia. Un acto social de clase media laica, en el que no había ni una sola invitada con pañuelo (la división social parece evidente en el país).
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Al llegar los invitados ibamos subiendo a cubierta dónde esperaban los novios, ella de blanco y él de esmoquin. Allí me reencontré con toda la familia de Başak nueve años después. A pesar de la emoción del momento y las ganas que tenía de verlos de nuevo, fue algo limitante. Sólo habla algo de inglés la tía; los padres ni una palabra. Así que muy contentos de vernos de nuevo pero, sin la traducción simultánea de la novia, el encuentro sólo daba para unas sonrisas. Apenas conocía a nadie más entre los 200 invitados, a excepción de dos compañeros del Yapi Kredi, el banco en el que trabajábamos todos en el año 1998, ellos como empleados y yo como consultor de Accenture.
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Lo más peculiar e interesante de toda la noche fue la ceremonia propia del casamiento. Zarpamos media hora más tarde de lo previsto porque algún invitado se había retrasado. Navegamos muy rápido para llegar lo antes posible a un pueblín del Bósforo, bastante más allá del segundo puente. Allí subió la funcionaria y tuvo lugar el casamiento en el propio barco!. En una mesa habilitada al efecto se sentaron los testigos, los novios (después de venir caminando desde el otro extremo de la cubierta entre aplausos) y la funcionaria, con una especia de bata larga para la ocasión. Ese momento tan teatral me encantó. Nunca había sido tan consciente de la representación pública que supone una boda. Porque, no te lo pierdas, allí estaba la funcionaria con sus papeles y... un micrófono! para que nadie en el barco se perdiera el "si quiero". Yo estaba en primerísima fila sin pestañear.
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Tras la firma de documentos, los novios bailaron una canción en la cubierta, no recuerdo cual pero modernita, nada de vals ni de canción típica turca. Poco después del baile bajamos para cenar. Todo muy correcto, nada de sobredosis de comida como es habitual en España. Entrantes variados turcos, cordero (muy rico) y fruta. La tarta nupcial (la típica de 3 pisos) la tomamos de nuevo arriba entre bailes, una mezcla de música americana actual con música turca popera.
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Esta fue mi tercera boda. La primera fue la de una pareja hetero amigos de mi novia de aquel entonces (veinte y pocos). La segunda fue una boda gay en Granada, hace dos años. ¿Cual será la cuarta?
