Senderismo en Les Avants

Desde Montreux, hicimos una ruta de senderismo conocida como Camino de los Narcisos, unas flores blancas que cubren los campos en mayo. En esta época del año quedaban algunas sueltas, pero a mi las que me llamaron la atención fueron las moradas de abajo. 

A la ruta de senderismo se accede en tren, mediante la línea GoldenPass Express, una de esas líneas "panorámicas" a la que le tenemos muchas ganas y que va desde Montreux a Interlaken. El pueblo de Les Avants queda a una media hora en tren de Montreux y desde allí se puede tomar el funicular hasta Sonloup (primera foto) para iniciar el recorrido. 

La ruta de senderismo de los Narcisos alterna campos con vistas a las montañas de Rochers de Naye, una excursión que hicimos el año pasado, bosques frondosos y vistas al lago Lemán. En conjunto, un paseo muy completo y bastante fácil (si se hace comenzando con la subida en el funicular.

Montreux Palace

Este sábado, hemos hecho noche en Montreux por primera vez, un uno de esos hoteles "Belle Époque" a los que tiene acceso David, con grandes salones e infinitos metros cuadrados. Fue una oportunidad para reencontrarnos y expandir nuestro conocimiento de la famosa "riviera" de la ciudad, un kilométrico paseo que recorre todo ese tramo de la costa del lago. Repetí baño mítico al lado del Castillo de Chinon, el primero de este año, así que el verano ha quedado oficialmente inaugurado. 

Festival en Neuchâtel

No somos muy festivaleros pero este viernes nos plantamos en Festi'Neuch, un festival de música que se hace en Neuchâtel en verano, a menos de hora y media en tren desde Ginebra. El evento dura 3 días pero nosotros sólo fuimos unas horas, para ver a Lucky Love, un cantante francés que encanta a David y que a mi me deja algo más indiferente. 

Lo mejor de la experiencia fue disfrutar del ambientillo: cuatro escenarios montados al lado del lago, con acceso directo, gente en tumbonas y bañándose, y nada de desfases de alcohol o drogas (claro, que nosotros a las 10 ya nos habíamos ido). Por el entorno, me dejó bastante mejor sabor de boca que Love Green en París, que recuerdo más agobiante y masificado.   

Marcha del Orgullo Gay en Ginebra 2025

Hemos experimentado nuestro segundo Orgullo Gay en Ginebra, después del primero en 2023. Quedó algo deslucido por algún chubasco ocasional, pero al menos estaba bastante concurrido. En cualquier caso, nos pareció bastante soso: poca música y todo muy comedido, muy suizo. Los organizadores hablaron de 35 mil personas, pero a saber. 

El recorrido atraviesa el puente y el centro de la ciudad para acabar en el Parque de los Bastiones, con el escenario delante del Muro de los Reformadores. Allí se concentran los puestos de comida y bebida, la música y los discursos. Así, descubrimos que el Orgullo de Ginebra es muy reivindicativo y no acepta patrocinio de empresas. Supongo que dependen del Ayuntamiento y del Cantón de Ginebra, porque son los que se encargaron de dar los discursos iniciales.

Exposición de Rebecca Brodskis en Ginebra

El año pasado, descubrimos en Art Genève 2024 a una artista franco-marroquí que nos gustó mucho: Rebecca Brodskis. La verdad es que somos bastante previsibles: retratos y colorines y ya caemos rendidos. 

Conocimos a la artista este jueves en Ginebra, en la inauguración de su exposición Together Separated en la galería Fabienne Levy. Es una chica joven, de trentaytantos, algo tímida, pero conversamos un buen rato, sobre nuestras experiencias respectivas de París. Ella ahora vive en Marruecos. 

La misma galería tiene actualmente otra exposición de ella en Lausanne, así que nos queda pendiente esa. Sospechamos que de esta artista puede acabar cayendo algo en casa...  

Cena con Amanda en Aubonne

Con tanto cambio de trabajos y ciudades en los últimos años, hemos ido desarrollando amistades aquí y allá. Algunas se han consolidado mejor en el tiempo, a pesar de la distancia, y el desgaste que supone la falta de contacto directo, y otras prácticamente se han perdido, dejando un poso de nostalgia por "aquellos tiempos". 

Amanda fue una compañera de trabajo en la segunda etapa de París, iniciada en 2014. Desarrollamos rápidamente complicidad porque en un ambiente organizativo muy conservador, yo era abiertamente gay y ella era abiertamente moderna, desprejuiciada y alternativa. Disfrutamos de unos pocos encuentros durante algo más de un año, tanto dentro como fuera de la oficina, y después la vida nos separó. Ella cambió de trabajo con la fusión y perdimos todo contacto durante 10 años. 

Hace unos meses, la vida nos ha vuelto a acercar geográficamente porque Amanda trabaja como directora de comunicación en una empresa industrial cerca de Lausanne. Nos hemos visto ya dos veces en los últimos meses: la primera vez en un restaurante de Ginebra y esta segunda vez en su casa.  Vive en Aubonne, un pequeño pueblo medieval, a 35 minutos en tren de Ginebra, con mucho más encanto del que yo esperaba... iglesia, castillo, arquitectura bien conservada. Su apartamento está en uno de esos edificios con 300 o 400 años, con vistas al lago, y con una curiosa cava de vinos comunitaria (última foto), dónde los vecinos guardan sus botellas y en ocasiones las disfrutan colectivamente. 

Lausanne, de arriba a abajo

El casco histórico de Laussane, la "cité", está muy bien. Está en cuesta, como toda la ciudad, englobado entre el Castillo St. Marie, sede del gobierno cantonal de Vaud (primera foto) y el ayuntamiento (segunda foto grande). A medio camino entre ambos se encuentra la Catedral y las escaleras porticadas en madera medievales. 

Se puede continuar el recorrido hacia abajo, hacia el lago, pasando por la estación de tren. Entre el castillo y el lago hay 2.5 km, así que obviamente, lo más cómodo para pasear en Lausanne es hacerlo de arriba hacia abajo (utilizando el metro para subir)