viernes, 28 de junio de 2019

Mercadillos y arquitectura colonial en KL

Seamos claros. Kuala Lumpur no es una ciudad monumental. Su patrimonio es más bien escaso. La ciudad tiene unos 200 años y surgió alrededor de la explotación de minas de estaño por los chinos. Actualmente, la zona que se puede considerar "histórica" se encuentra rodeada por distintas zonas de mercadillos: Chinatown, Little India y el Central Market. Recorrimos los 3 sin mayor pena ni gloria pero interesados en ver el ambientillo y las muestras de arquitectura "antigua" que quedan. Comimos por allí en un café de un hotel, un lugar bastante cuidado y en el que la factura ascendió a 5€. Ahí nos dimos cuenta del nivel de vida del país. Después lo confirmamos comprando agua en un 7 Eleven porque buscaban dependientes a 1,69 € por hora (y el cartel añadía que era más que el precio de mercado que se sitúa a 1,27€!).

Más interesante que el batiburrillo de mercadillos varios nos pareció la visita a la mezquita de Masjid Jamek. Allí una amable señora que actuaba como guía nos explicó que se trataba de la mezquita más antigua de la ciudad y que estaba situada en el enclave que daba nombre a la capital, en la confluencia de dos ríos (quinta foto abajo), ya que Kuala Lumpur significa en malayo "confluencia fangosa". También nos dio un cursillo acelerado sobre el Islam; bastante interesante, la verdad, así que fue una visita la mar de instructiva. 

En los alrededores de la mezquita hay buenos vestigios de arquitectura colonial, como el edificio del Sultán Abdul Samad que aparece en la sexta foto. Aunque ese es el edificio de mayor porte, hay algunos más alrededor, algunos en proceso de rehabilitación ya que tienen un plan completo de regeneración de esa zona de la ciudad, incluyendo los 2 famosos ríos de la confluencia fangosa que ahora mismo se ven bastante asquerosillos. 

Completamos nuestra visita a la Kuala Lumpur más histórica comprando arte en el Mercado Central. Tenemos un problema porque ya no tenemos sitio dónde poner más cuadros y en el futuro piso de Madrid tampoco vamos a tener paredes suficientes. Aún así, no pudimos resistirnos al encanto y buen precio de algunas obras, como la chica del pelo verde de la última foto, que viajará a Europa acompañada de una hermana de pelo azul. Hace tiempo que nos da por los "dípticos"...