domingo, 6 de enero de 2019

Niki de Saint Phalle en Pekín

Estamos en Pekín desde el jueves 3 de enero y muy gratamente sorprendidos con la ciudad. Tiene la mezcla perfecta de historia, arquitectura contemporánea y ambiente artístico que nos encanta. Sólo nos falta la "escena gay", aunque tal vez exista y no la hayamos descubierto. Vinimos desde Shanghai en avión, algo más de 2 horas, aunque luego nos enteramos de que hay un tren de alta velocidad que tal vez hubiera sido más interesante. 

En nuestra primera tarde en la ciudad nos dimos cuenta de que las distancias son enormes, y que el tráfico es bastante intenso. Es una ciudad poco práctica en ese sentido. Nuestra primera "salida" fue al Today Art Museum y ya nos emocionamos en la puerta porque tenían un grupo escultórico de Yue Mijun, el artista chino de las figuras sonrientes que nos encanta. En todo caso, fuimos hasta allí porque tenían una exposición temporal de Niki de Saint Phalle, una artista francesa que tardamos en descubrir pero de la que somos muy fans, por ser mujer, por feminista y sobretodo porque nos gustan esas "nanas" tan "pop", super coloridas y voluminosas.

La exposición está muy bien montada. Es una retrospectiva que cubre la evolución cronológica de la artista.  En una gran sala reproduce el espíritu del jardín que montó en la Toscana, al estilo del Parque Güell de Gaudí. La verdad es que Pekín no podía habernos causado mejor impresión con un museo tan estupendo y con una exposición tan buena.