martes, 4 de enero de 2011

Año nuevo en París

Los franceses son un poco sosos con el Fin de Año, ni campanadas, ni fuegos artificiales ni nada. Este año todo muy espartano. Eso sí, muchísima gente en la calle. Desde luego parece que la tradición es ver el inicio de año en la calle. La experiencia de ir al metro Trocadero, en frente de la Torre Eiffel, fue inolvidable. Enlatados es poco. Ibamos realmente al límite en el vagón de metro; un poco angustioso. Y para salir por las escaleras lo mismo. Realmente de pensar en esos aplastamientos masivos que luego salen en la prensa.
-
El día de Año Nuevo dimos un paseo por el Promenade Plantée, un parque sobre una antigua línea de tren de varios km de longitud, que arranca (o acaba según se mire) en la Gare de Lyon y que ha sido la idea detrás del proyecto actual de High Line en Nueva York. Sólo recorrimos un pequeño tramo, así que tocará volver. Por la tarde vimos Mozart l'Opera Rock, que es todo un fenómeno y exitazo en París. La música está bastante bien (el último super-éxito es su canción final "C'est bientôt la fin") pero nuestro actual nivel de francés aún nos limita bastante para seguir diálogos y canciones en una obra larga.
-
Este primer domingo de 2011 nos acercamos al Musée du Quai Branly, uno de los que aún teníamos pendiente. Lo mejor es el edificio de Jean Nouvel, espectacular desde todos los angulos, sobre todo desde el exterior, con un jardín muy moderno como parte del diseño arquitectónico y vistas a la Torre Eiffel. El museo está centrado en arte no occidental: culturas asiáticas, africanas, americanas y de Oceanía. Obras ciertamente muy vistosas y relevantes pero ... todas esas máscaras y totems no son lo mío.