Punto y aparte
Tras muchos nervios, subidas y bajadas al trastero y 200 euritos de sobrepeso con Easyjet nos hemos instalado en París. El piso nuevo tiene sus cositas: más pequeño, habitación separada con cortinitas en lugar de puerta y mini-lavadora que parece de juguete, pero también tiene un aire bohemio bastante majo, de vigas de madera al aire y pared de ladrillo. Estamos muy bien situados, cerca de Les Halles, en una zona peatonal, llena de ambientillo, restaurantes, cafés y tiendas varias. Creo que todo pinta bastante bien.