miércoles, 9 de febrero de 2022

Ribadesella en invierno

Ribadesella siempre nos deja buen sabor de boca. Desde 2009, cuando Juan se hizo la casa allí, hemos estado muchas veces, a veces yo solo, otras veces con David y un par de ocasiones también con mis padres. Nos gusta la villa en si misma, las aldeas de los alrededores y la gran cantidad de puntos de interés a los que puedes llegar en un radio de coche de una hora: toda la costa, desde Gijón hacia un lado hasta Santillana del Mar, ya en Cantabria, en el otro, pasando por las rutas interiores con las que se alcanza fácilmente Oviedo o los Picos de Europa, por poner dos ejemplos. 

La mayor parte de nuestros viajes a Ribadesella han evitado el invierno, por aquello del frío y las lluvias. Sin embargo, este viaje en pleno febrero ha ido acompañado de un tiempo excelente, con un sol radiante y temperaturas bastante agradables. Ha sido una delicia disfrutar de ese verde intenso de los prados y montañas, y del fuerte oleaje batiendo contra esa costa tan espectacular. Nos hemos vuelto a Madrid recargados de energía natural y con ganas de volver a Asturias en cuanto tengamos ocasión.