viernes, 12 de abril de 2019

Correr en Copenhague

Mi hotel en Copenhague no tenía gimnasio, así que aproveché las largas horas de luz para salir a correr el lunes por la tarde. Fue una hora y media de recorrido que me permitió conocer nuevas zonas de la ciudad al estilo de las experiencias que he tenido en otros sitios, como HamburgoMilán o Frankfurt

Para empezar, recorrí todo el eje de lagos rectangulares artificiales del centro, Sortedams So. Son muy anchos y poco profundos, con laterales para pasear o correr (dos primeras fotos). Después bajé al Kastellet, una ciudadela del siglo XVII en forma de estrella, pegada al río (cerca de la Sirenita, aunque no se ve por lo minúscula que es). Es definitivamente un básico de Copenhague, muy agradable. Desde allí, volví de vuelta al hotel atravesando el centro y varios parques, incluido el Orsteds Park (dos últimas fotos), en el que se supone que hay ligoteo gay, aunque yo no observé nada.