sábado, 22 de diciembre de 2012

1789, Los Amantes de la Bastilla

Ya entendemos cómo va esto de los musicales en Francia. Con cada "rentrée" (vuelta de vacaciones en septiembre) se estrena en París un musical de producción propia francesa (es decir, aparte de los "Mamma Mia" y demás de producción anglo-sajona). En los meses anteriores al estreno van publicando algunos videoclips para dar a conocer las canciones y calentar motores. Después, el musical de la temporada pasa unos meses, incluyendo la Navidad, en el Palais des Sports de París antes de hacer gira por el resto del país.

Sin darnos cuenta de esta tradición anual, resulta que hace dos años vimos Mozart, y el año pasado Dracula (de lo mejorcito; de hecho nos gustó tanto que repetimos). Este año el musical es 1789 Les Amants de la Bastille y bueno, sí, está bien, pero tampoco mata. Cuando arranca, proyectan un texto que describe el contexto social de la época: estado en bancarrota, ciudadanos empobrecidos y cada vez soportando mayores impuestos, descrédito de la clase dirigente ... En fin, suena todo muy familiar, sólo que por ahora no está afectando a Francia, un país en el que, como hemos analizado repetidamente en el máster, está muy arraigada la cultura de resistencia y no sumisión. No como otros países en el sur de Europa, que lo aguantan (casi) todo con resignación cristiana...

El vídeo de abajo, "Tomber dans ses yeux", es el último single del musical y da idea de la estética y producción general, bastante sencillita.