80 Cumpleaños

A partir de hoy, con el cambio de hora, los días ya se hacen diminutos. Pero este fin de semana todavía los días han sido largos, con buena temperatura durante el día y una luz dorada impresionante. Ha sido un lujo poder disfrutarlos en Vigo.

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El viaje en coche deja poco tiempo disponible pero el viernes aún llegamos a tiempo a Baiona para poder salir a dar una vuelta con el barco de mi hermano. Para mi fue algo incómodo porque tuve que atender una teleconferencia de 50 minutos y además sin poder hablar (entre el ruído del agua y del barco era imposible hacerlo). Pero jap lo disfrutó mucho, y a Entropi@ le sirvió para dormir la siesta.

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El sábado celebramos el 80 cumpleaños de mi padre. Para lo poco que me gustan a mi las celebraciones familiares esta la disfruté bastante. Fue una larga comida, de 2 y media a 8, con la tradicional "cantata" incluida. Antes no soportaba cuando los mayores se ponían a cantar, ahora lo llevo con más resignación y veo el valor antropológico del momento: supongo que será una tradición que acabará desapareciendo, aunque mis dos hermanos mayores aún la conservan. Lo mejor del cumpleaños fue, para mi, tener la oportunidad de hablar con unos y con otros, y sobre todo con mi sobrina Iris, que últimamente centra el foco de las preocupaciones familiares. Estudia psicología en Santiago y sus padres y abuelos la ven muy descontrolada. Yo la vi estupenda: guapísima y muy sensata. Desde luego no es a la que veo peor en la familia, ni mucho menos.

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Esa tarde de sábado el atardecer desde la playa de Samil, con las Islas Cíes al fondo, fue ...

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