Museo Marmottan Monet

Con esto de que nos cambiamos de piso en unas semanas, nos hemos animado a visitar el Museo Marmottan Monet,  por aquello de que está en el barrio y luego nos dará más pereza venir hasta aquí.  Tenemos cierta sensación de despedida de nuestra vida en el 16, aunque esta zona de París seguirá estando muy presente en nuestras vidas, al estar mi oficina aquí.

El Museo Marmottan Monet nos gustó más de lo que esperábamos. Se formó a partir de colecciones privadas, una de las más importantes fue la de un hijo de Monet que donó todos los cuadros de la casa familiar en Giverny.  Así que venga nenúfares y más nenúfares, aunque no tengan las dimensiones de los mega-cuadros de l'Orangerie. También había una exposición temporal bastante interesante sobre el baño a través de la historia. Gracias al musculitos de abajo, hemos conocido un nuevo pintor interesante, Marcel Gromaire, un francés del siglo XX del llamado Realismo Social (o sea, que pintaba proletarios y campesinos).