Amiens

Lo más conocido de esta ciudad es su Catedral. Aparece en todos los reportajes y documentales sobre catedrales francesas y se anuncia como la más grande del país. El detalle que se repite en todos los folletos turísticos es que en su interior caben dos Notre Dame de Paris. Es muy aclamado también el laberinto que hay en el suelo de la nave principal. Lástima que las sillas no lo dejaran apreciar bien pero sospecho que sólo estaban allí puntualmente, por la actuación del coro de niños del domingo (400 angelitos de todas las escuelas católicas de la región; un horror sólo apto para padres entregados).

Las otras dos cosas significativas de Amiens son el barrio de Saint-Leu que tiene pequeños canales que le dan un toque bastante peculiar, y les Hortillonnages, un sistema de huertas y jardines entre cientos de mini-canales que se cultivan desde la Edad Media (fotos abajo de los jardines y del barrio).

Más allá de los mencionados atractivos turísticos "clásicos", nos dimos un masaje thai al llegar el viernes (primera experiencia; no está mal) y también cenamos estupendamente en el restaurante Au Relais des Orfèvres, que aún no me explico como dBt fue capaz de encontrar. Me gustan cada  vez más estas excursiones con "atracciones gastronómicas".