Museos de Tokyo
Tokyo tiene fama de ciudad moderna sin demasiado interés histórico-cultural, más allá de las compras. Ciertamente, la arquitectura quedó arrasada en la 2ª Guerra Mundial pero hay varios museos que merecen una visita:
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Museo Nacional de Tokyo. Es un complejo de varios edificios situado en el parque Ueno. Lo más interesante es el edificio principal con arte japonés, y en concreto en mi opinión la sección de escultura. También está muy bien la sección de grabado japonés ukiyo-e, esas láminas con vistas del Monte Fuji, paisajes o cortesanos.
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Museo de Arte Contemporáneo. La colección permanente no es gran cosa pero hay este verano dos temporales bastante interesantes. Una con un montón de dibujos familiares de Elizabeth Blair, dibujante principal de Walt Disney. La otra exposición es de Kosho Ito, un japonés que realiza grandes instalaciones con materiales cerámicos de distintos tipos. Muy interesante.
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Museo Ghibli. Está dedicado a las obras de animación de Hayao Miyazaki, autor de culto con obras como La Princesa Mononoke o El Viaje de Chihiro. Se necesita reserva previa. Nosotros llevábamos la entrada desde España y éramos los únicos occidentales en el museo. A los japoneses les causa furor y van en hordas de familias con sus niños. Era casi imposible moverse en la tienda. El edificio está muy bien pero el museo es decepcionante en mi opinión. Las salas no tienen demasiada gracia, quitando que los dibujos son muy chulos. Con la entrada se puede ver un corto de animación en el auditorio.
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Museo Edo-Tokyo. Arquitectónicamente el edificio es muy llamativo, como una nave espacial apoyada sobre unas patas. Dentro hay maquetas de la ciudad en la etapa Edo, cuando el país estaba cerrado a cualquier influencia extranjera, la época de la arquitectura de madera, los samurais y los kimonos. También hay una sección dedicada al Tokyo moderno, a partir de 1868, cuando se abre el país al exterior. Me impresionó oir los sonidos de los bombarderos B29, centenares de aviones arrojando toneladas de bombas incendiarias sobre la ciudad durante la 2ª Guerra Mundial. Sólo en alguna de las noches morían decenas de miles de personas porque todo era madera y los incendios eran masivos. Escalofriante. Fotos de una ciudad arrasada que me recordaron también a las de Berlín tras la Guerra. Después de verlo se entiende perfectamente que la ciudad actual sea totalmente moderna; no quedó nada tras 1945.
