domingo, 1 de enero de 2023

Celebraciones navideñas

Estas últimas semanas he pasado por celebraciones navideñas en 3 ciudades distintas. Primero, en Ginebra, alrededor del trabajo. En mi oficina se celebró una fiesta para hijos de empleados muy bien montada, con actuación de danza y múltiples actividades. Fue toda una experiencia verlos corretear, gritar y lloriquear por allí. Unos días más tarde, tuvimos la fiesta para empleados y sus parejas, también muy bien montada, con música en vivo, en un local para eventos en medio del río de Ginebra. Fue emocionante ver  algunas parejas de gays y conocer a muchos de los maridos de las personas de mi equipo (compuesto en exclusiva por mujeres). 

En Madrid, asistimos al tradicional concierto de Raphael. Estuvo bien, con un público muy entregado y, claro, canciones super conocidas. Los días de Nochebuena y Navidad también los pasamos en Madrid, con cena en casa y comida en el hotel de David porque a él le tocaba trabajar, así que Juan y yo lo vimos en su ambiente natural de trabajo.  

La recta final del año 2022 la pasé fundamentalmente en Vigo, con un primer viaje de dos días, en los que tuve que pasar el trago de ver el deterioro definitivo de la salud de mi padre. Tan mal se ha puesto la cosa que el día de Fin de Año nos trasladamos en coche a Vigo para que mi madre no lo pasara sola. Es evidente que 2023 va a arrancar con la muerte de mi padre. Es una cuestión de días; qué sabe nadie.