El té de las cinco
He cargado con la cámara todos los primeros días pasados en Londres con la excepción del día que teníamos sesión de "Afternoon Tea" así que sólo puedo compartir una foto tomada con la blackberry. Se trató una vez más de un detallazo de mi jefa que en plan introducción a la cultura británica organizó con una compi del trabajo una tarde de té al salir de la oficina, a eso de las 5 y media.
Me sonaba lo del "té de las 5" pero no sabía la parafernalia que implicaba... y me ha encantado, así que me veo repitiéndolo con las visitas a partir de ahora. Básicamente es una merienda-cena que tienes que reservar con antelación. Fuimos al Hotel Lancaster London porque queda cerca de la oficina. En la mesa, ya preparada cual cena, había una pequeña bolsita de trozos de pan para los patitos de Hyde-Park, que está allí al lado. Casi me parto imaginándome a las señoras británicas echando pan a los patos con su sombrerito y bolso en el brazo. Al llegar te sirven una copa de champán mientras decides el tipo de té que quieres en una carta de 5 o 6 diferentes. Después traen un pequeño aperitivo y al cabo de unos minutos el té con las cosas de comer organizadas en 3 grupos: sandwiches (de salmón, jamón, gambas, vegetales...), scones (una especie de panes en los que se pone nata y/o mermelada) y pasteles.
Por lo visto la tradición viene del Imperio Británico en el que el té de la tarde servía como la comida intermedia entre el desayuno y la "sopa" de la noche. Se denominaba "high tea" al que hacía la clase alta, con más comida de por medio. En nuestro caso el precio por persona era de 29 libras incluyendo el champán, pero por lo visto hay alguno todavía más sofisticado al que iremos más adelante, cuando nos recuperemos de la sobredosis de calorías.