Elecciones

Mi elección de este fin de semana ha sido irme a Barcelona: visita a dvt a la vuelta del viaje a USA. Los amores a distancia son complicados así que hice el esfuerzo a pesar del jet lag (aterricé el jueves). Se me complicó la cosa porque el viernes cancelaron el vuelo (Vueling...la caída de un mito) y tuve que viajar el sábado al mediodía (y correr por la T4 para no perder el vuelo). Pero no quiero hablar de los nervios y ansiedad que pasé, que bastante llevo ya en esta temporada Lexatin. Sólo cosas positivas. No pude votar... pero al menos votó dvt. Y no voy a dedicar un minuto a los resultados del domingo... apagué la tele en cuanto vi las imágenes de la calle Génova. No digo más.

Cosa positivas e interesantes de este fin de semana de elecciones:

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1/ Igor Mitoraj en la Rambla de Catalunya. Escultura en la calle. Nos dimos un agradable paseo el sábado al salir de Llongueras.

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2/ Retrato de una obsesión, la película sobre la fotógrafa americana Diane Arbus. Interesante por acercarse a la vida de esta mujer, pero como película es demasiado lenta, espesa y friki.

3/Exposición del fotógrafo americano Friedlander en CaixaForum.

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4/ Paseo explorando los nuevos edificios del Port Olimpic, especialmente la sede de Gas Natural.

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5/ El sistema bicing para moverse por la ciudad. Nos daremos de alta en breve. Ya contaré más.

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6/ Domingo tarde en el barrio de Gracia hablando de cositas varias y comprando sushi para llevar. Las pequeñas cosas de la vida.

Wall Street

Atardecer de lunes en Manhattan. Tenía una cena-gala en Wall Street, al lado de la Bolsa de Nueva York. Antes de la cena pude dar un largo paseo de algo más de una hora a mi aire. Emocionante... Bajé por Wall Street (una decepción de calle; tan famosa y tan estrecha y poca cosa) hasta el East River. Me encantó ver Brooklyn enfrente y el famoso Puente. Recuperé esa ilusión que hacía tiempo que no sentía con los viajes. Me sentía feliz-feliz con algo de nudo en el estómago. Comprendí que la edad no eliminaba mi capacidad de emocionarme o ilusionarme. Sólo necesitamos buscar los estímulos adecuados, las cosas que nos hacen vibrar. Caminé también por Broadway hasta el parque del City Hall. Y también bajé a la Zona Cero, dónde estaban las Torres Gemelas. Un poco angustioso ver ese enorme hueco que han dejado. Una ausencia permanente. Tantos sitios "conocidos" y todos tan cerca. Todo muy manejable. Es una ciudad en la que es fácil orientarse. También con coche, como comprobé el sábado por la tarde. Una delicia.


Respecto a la cena-gala, fue un evento lleno de glamour. Se trataba de una de esas noches que sirven para recaudar fondos para alguna ONG. En este caso se trataba de GLSEN (Gay, Lesbian, Straight Education Network), una organización muy interesante que combate la homofobia en las escuelas. Proyectaron varios videos sobre la situación. Y presentaban la gala unos adolescentes encantadores, tan jovencitos y tan orgullosos de su orientación sexual. Conocí a un compañero de la empresa que vive en Chelsea, el barrio gay de Nueva York, y va y viene a la central todos los días. Me hizo pensar de nuevo que era factible venirse a trabajar aquí y vivir en la ciudad. También conocí a un ejecutivo de IBM muy majo con el que estoy en contacto para que venga a Madrid al evento que estamos organizando sobre LGBT en el trabajo. Un día redondo. Después dormí como un lirón.

New Hope

Tarde de domingo en New Hope (que nombre tan poético) con Mónica O. El mejor momento del viaje. Un paseo muy agradable por las callecitas estilo XVIII o XIX. Ambiente de moteros y de gays (era fin de semana de pride celebration). Muy animado. Conversación sin parar: profunda e intensa. De sus problemas domésticos con la empleada interna que ha criado a los niños, hasta mis problemas mentales con los múltiples agobios que me ronda últimamente la cabeza, pasando por análisis en detalle de la nueva estrategia de Diversidad de la compañía y mis nuevas expectativas laborables a nivel europeo. Un gustazo.

Manhattan

Tarde de sábado en Manhattan. Fui en coche con una compañera de la oficina en España que también anda por aquí estos días. Yo tambien alquilaré coche la próxima vez para moverme. En menos de una hora te pones en Nueva York por autopista, saltando del ruralismo más absoluto a la gran ciudad. Una hora de parking en Manhattan, 20 euros. El siguiente tramo de tarifa es hasta 10 horas, 30 euros. Sencillo. Fue una tarde lluviosa, con poca luz, e incómoda para caminar. Callejeamos los alrededores de Union Square, dónde había un mercado callejero. De repente te ves caminando por Broadway o la Quinta Avenida. Todo parece mítico. Y en cierto sentido lo es. He sentido que es una ciudad que me encanta; los edificios, la gente, las calles. Sé que volveré varias veces en mi vida. Absolutamente.

Mixed Emotions

Llevo ya unos días de trabajo por aquí. El martes tuve mi primera impresión sobre la central de la compañía. Un edificio hexagonal en el medio de un gran bosque. Arboles por todos lados... en el exterior y en el interior del patio del hexágono. De película de terror... la jungla que lo invade todo. De repente me han asaltado dudas de para qué me quiero venir a vivir a Estados Unidos. Tanto pedir traslado y una vez visto esto.... sospecho que me agobiaría un poco. Habrá que meditarlo más. Lo mejor del edificio es el mail-robot... un carrito automático que recorre los pasillos con el correo parando en determinados sitios. Espero hacerle una foto antes de irme. La cafetería también está estupenda y la variedad de comida es muy grande. Los americanos, como siempre, muy sonrientes y un poco hmeros.

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Miércoles y jueves estuve en un hotelito un pelín decadente, en el que hacíamos la reunión del lanzamiento del Grupo de Mujeres a nivel mundial, como parte de la nueva estrategia de diversidad. Muy enriquecedora experiencia. Además vinieron los super-jefazos de la empresa, esos super ejecutivos americanos de las películas, ricos y poderosos. Esos mismos que desde España parecen semi-dioses y que aquí parecen más familiares.

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Conocí en la reunión a la persona que va a coliderar el lanzamiento y el trabajo del grupo LGBT (Lesbian, Gay, Bisexual and Transexual). Tendré que trabajar con ella estrechamente en los próximos meses. Hemos hecho buenas migas. Es una mujer bajita, lesbiana, directora de una Unidad de Negocio de aproximadamente 80 personas. Es de Puerto Rico... así que hablamos en español, y eso siempre facilita la empatía. Ha estado en el armario laboral prácticamente toda su vida. Cuando nos presentamos al grupo el miércoles, ella no dijo nada de su lesbianismo pero yo sí dije que tenía novio y que no estaba casado aunque en España los gays teníamos derecho al matrimonio.

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Al día siguiente, jueves, ella hizo un gran coming out delante del presidente mundial, que vino a la reunión. Le habló del miedo que sentíamos los Gays y Lesbinas en el trabajo, y de la importancia de crear un ambiente de seguridad para nosotros. Fue un momento muy dramático e intenso. Me sentí muy feliz por sus palabras. Durante la cena me confesó que lo hizo para compensar de algún modo su falta de valentía del día anterior y al ver que yo había tenido la fortaleza y naturalidad de presentarme como gay ante el grupo. Me he sentido feliz de haber servido para darle fuerza. Estoy seguro de que vamos a trabajar muy bien juntos.

Shopping Experience

Mi lunes de vacaciones en New Jersey ha sido de Shopping Experience total, acompañado de Mónica O y su hermano. Atravesamos todo el estado de New Jersey (le llaman "Garden State" porque es muy verde, lleno de bosques frondosos; muy bonito) para llegar a unos Outlets en el estado de New York. En total sería como hora y media de trayecto en coche. Pero para los americanos las distancias son diferentes. Como todo es grande están habituados a hacer largos recorridos con el coche. El sitio se llama Woodbury Common y es como un pueblito, con sus plazitas y calles, lleno de almacenes destinados a tiendas de las más famosas marcas: Armani, Adidas, Nike, Diesel, GAP, Banana Republic, Calvin Klein... Muy buenos precios pero tampoco me volví loco comprando, no me parecía que hubiese cosas estupendas. Y para colmo la talla "S" americana me va algo grande así que no me veía bien con casi nada. En los baños había maquinitas como las de los preservativos pero con fármacos para el dolor. Me gustó el detalle. Deben ser conscientes de que las compras en exceso agotan y generan jaqueca. No pude resistirme a sacar una cajita de Tylenol.

La cena la hicimos en Nueva York. Sí, ya he pisado Manhattan. Entramos por el puente George Washington y bajamos recorriendo la isla por la autopista que la circunvala, dejando Queens enfrente. Mi primera impresión no ha sido espectacular. Me pareció algo oscura. Tal vez porque mi última referencia de gran ciudad es la de Shangay, y aquello parece un decorado de Las Vegas. Cenamos en un sitio, en 1st Avenue, con espectáculo de Drags. Curiosa experiencia que no hubiera tenido yo solo (en Madrid sólo estuve una vez en un sitio similar, el Gula Gula). Todo un día muy rico y chévere que diría Germán, el hermano colombiano de Mónica O.

American Beauty

Primer viaje intercontinental en business. Tarde un poco en hacerme con todas las opciones del sillon; ya iba mas de medio viaje cuando descubri los reposapies. Lo mejor el neceser, con sus tapones, antifaz y calcetines, ademas de pasta de dientes y cepillo, locion hidratante y protector labial. Dormi poco. Necesito algo mas fuerte que el Lexatin. Sufro un poco con este teclado americano sin acentos pero lo superare.

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Hoy domingo y manhana lunes duermo en Belle Mead, en el centro de New Jersey, en casa de Mónica O. Una zona y una casita al mas puro estilo American Beauty. Me gusta esta sensacion de asomarme a otras vidas, en otros lugares. Es lo bueno de viajar a casa de amigos; una experiencia muy distinta a la del hotel.

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Disfrute de un paseo por las calles proximas. No creo que esto se pueda llamar ni barrio ni urbanizacion; son parcelas y cada casa es distinta; todas sin vallar. Cada una con su buzon y sus coches en la puerta. No vi banderas americanas como suele ser habitual. Un ambiente muy apacible y tranquilo. Todo muy cuidadito y pulcro. Hetero-vidas sin preocupaciones aparentes. La tarde de domingo era casi veraniega y al volver a casa los ninhos y su papi estaban disfrutando de la piscina exterior climatizada.

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En torno a las 7 de la tarde cenamos fuera. Barbacoa de carnes. Casi me pongo a comer sin haber bendecido la mesa... El punto interesante de la cena fueron los "patacones", unas tortitas de platano verde frito aplastado. Tipicas de Colombia, de donde es en origen Mónica O y los familiares que la acompanhan estos dias en casa, su hermano y la mujer de su padre. Disfruto de esta sensacion de american way of life.

Tipping Point

El término inglés "Tipping Point" viene a ser algo así como el punto de desbordamiento, el momento crítico a partir del cual un fenómeno deja de producirse a pequeña escala para crecer de forma exponencial. El concepto viene de la epidemiología, ese momento repentino a partir del cual hay una epidemia de alguna enfermedad, cuando anteriormente sólo existían unos pocos focos aislados de la misma.

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Hay un libro, La Clave del Exito, que toma ese concepto para llevarlo al terreno social y explicar como se convierten en masivos determinados fenómenos, desde unos zapatos que se ponen de moda hasta la difusión de determinados mensajes, o la existencia de oleadas masivas de ansiedad o de suicidios. Este libro ha sido mi mejor lectura en lo que va de año. Hay un buen resumen en la web Tipping Point. Merecería la pena poder comentar aquí los conceptos principales, sobre todo la existencia de conectores, mavens y vendedores, tres tipos de personajes que son fundamentales para la difusión de cualquier fenómeno social de masas. Tal vez en el futuro podamos volver a este tema tan apasionante, porque está totalmente relacionado con las redes sociales (los conectores son los que hacen posible la teoría de los 6 grados de separación).

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He tenido la sensación de tener un tipping point emocional esta semana: pequeños cambios que producen grandes efectos en muy poco tiempo, volcando totalmente una situación. Pensamientos negros sobre distintos ámbitos de la vida que pasan de ser puntuales a mezclarse en torbellino. Tristeza y ansiedad como nunca antes la había sentido. Escasas horas de sueño, incluso con Lexatin. Estoy convencido de que esto me hará más fuerte y mejor persona, con mayor empatía para entender algunas situaciones.

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Fin de una semana algo infernal. Mañana dormiré en New Jersey y estoy convencido de que los próximos días me ayudarán a abrir una nueva etapa vital.

Trabajo y lluvia

Termina la semana en Barcelona; hoy domingo vuelvo a Madrid. Han sido días de trabajo y lluvia. Me organicé para trabajar desde aquí el jueves y viernes, con el portátil y el móvil. La lluvia ha acompañado todos estos días.

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Las tardes han sido de biblioteca pero poco estudio y las noches de bastante vida social. Ha estado de visita AHM con su clubbing way of life y sus múltiples ligues; también un ex suyo que trabaja en MTV en París y que ha superado recientemente un cáncer de hueso en una pierna (que historias más duras superan algunas personas; a mi me aterran). También pasó por casa Fer-Tendencias, que se autodefine como fan de la simetría, y lleva siempre conjuntado camiseta y calzoncillo. Por último, esta pasada noche de sábado vimos a JHM, recién llegado de Hong-Kong, de abrir la tienda super-exitosa de H&M allí. Una tienda enorme con 50 guardias de seguridad y capacidad simultánea para 1500 visitantes; colas desde las 10 de la mañana, clientas pidiendo cajas VIP para no tener que esperar en las colas; estreno de la colección de Madonna con 5o gabardinas firmadas por ella.... Todo un estrés de trabajo que se refleja en los kilos que ha perdido.

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También he bailado bastante este finde; la noche del viernes en Salvation, la del sábado en Martin's, en la Only Men's Party. Es increíble como se acumulan las cosas, las experiencias, las sensaciones, las personas... una tras otra. Todo lo que vivimos y todo lo que olvidamos. El paso del tiempo sin cesar.

Peligrosidad y pasta

Hemos comprado un montón de pasta en Milán. Nos dio un punto compulsivo y todo nos parecía poco... tricolor, al tartuffo, de salmón, negra... para regalar, para cocinar, para Madrid, para Barcelona...

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Hemos estrenado esta primavera de pasta con una comida con JyK, unos amigos de Barcelona, los únicos catalanes. El primero trabaja en un help desk de informática, y el segundo es recepcionista en un hotel. Preparamos para la ocasión unos tagliatelle al tartuffo que habían costado una millonada. Resultaron bien pero para su precio algo decepcionantes.

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La sorpresa del día vino con la conversación de sobremesa. Resulta que Joan es aficionado a los rallys. Me quedé impactado con ese mundo. Lleva unos 14 años siendo copiloto. Primero hacen viajes de reconocimiento, para explorar el terreno y tomar notas detalladas de todo... curvas, barrancos... A la hora de la verdad, cuando toca correr, el copiloto va cantando todo el rato lo que viene a continuación, tipo "derecha, 3, 6 y no sé que más" para indicar el tipo de curva, su grado de apertura, de inclinación... Todo esto con la adrenalina disparada para decirlo con la antelación adecuada, para que el piloto tenga la información a tiempo y prepare la maniobra. En fin, me genera ansiedad sólo de contarlo e imaginarlo; no es una aficción apta para cualquiera. Por no hablar de los accidentes, incluyendo vueltas de campana, por las que pasa cualquier aficionado a los rallys. Debes liberar mucha adrenalina y quedarte muy relajado... pero yo no soy capaz ni de subir a las montañas rusas.

Lago di Como

Domingo de excursión al Lago di Como, a una hora de distancia en tren desde Milán. Es un Lago en forma de Y invertida, famoso por la concentración de villas y mansiones de gente famosa. Los pueblecitos de las laderas son muy monos y con un aire medieval. Me asombra encontrarme esa arquitectura tan cuidada por el mundo adelante con el feismo y destrozo que se ven en España en general y en Galicia muy en particular.

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El paisaje recuerda al de los fiordos de Noruega, con laderas montañosas de gran pendiente. Comimos en Bellagio, el pueblecito que está en el vértice de la Y invertida, y que es uno de los destinos turísticos principales. Volvimos en barco lento, de los que van parando casi en cada pueblo, para poder disfrutar el paisaje (la ida la habíamos hecho en un servicio rápido que no da para ver nada). Fin de excursión con subida al funicular de Como. Todo muy lindo.

Milán

No me imaginaba Milán así, con tanto edificio de piedra con solera. Tanto oir que era una ciudad moderna que no me esperaba el tranvía y todos esos edificios decimonónicos. Nuestro hotel estaba enfrente de la Iglesia Santa Maria delle Grazie, dónde está el cuadro de La última Cena, el del Código da Vinci. Imposible verlo; todo reservado hasta finales de mayo.

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Lo que más nos ha gustado ha sido la Galería Vittorio Emanuelle II, aunque dvt se la imaginaba mucho más grande, y el Duomo, una de las catedrales más bonitas del mundo, con todas sus agujas coronadas de estátuas. También merecen la pena el Barrio de la Moda y el de Brera, inundado de mesas de lectoras de cartas. Entre las casualidades interesantes nos cuadró una exposición de diseño en el Castello Sforzesco y una Cow Parade, que tenía a la ciudad atiborrada de vacas (por cierto, hay también una prevista en Vigo en 2007).