Visita sorpresa de dvt, fin de semana inesperado. El sábado vimos un piso en el barrio, en la calle Cervantes, pero no nos gustó nada. Nos dimos cuenta enseguida: interior, poca luz, cocina minúscula agobiante... y una pasta claro. Me veo viviendo de alquiler por una buena temporada.
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Después del piso nos fuimos a la Fundación Telefónica, en Gran Vía. Vimos una exposición de videoarte de Nam Jum Paik: robots hechos de monitores de tv y de radios antigüas; mural de imágenes cambiantes... bueno, no estuvo mal pero sin estridencias.
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Comida en Casa Palacio, un edificio que hemos visto reformar al ladito de casa y que se ha converitido en un espacio super interesante: gastronomía y arte contemporáneo de la mano. Todo super cuidado. Actualmente celebran FoodArt Madrid y hay cocineros invitados de toda españa. Han habilitado 3 comedores en los pisos superiores. Adicionalmente, hay un restaurante permanente, Alboroque, que es dónde comimos dvt y yo. "Propuesta" de 75 euros: 6 mini-platos y 2 postres; eso sí todo exquisito. El atún con helado de ajoblanco de lo mejor. Lástima que esta alta cocina sea tan inasequible.
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Para completar el fin de semana, chateo largo de domingo con Googlevil, y visita con jap al Día de la Esperanza que celebra Intermón-Oxfam, este año en la Plaza de Santa Ana. Pegaba el sol y había poco espacio para tanta gente. Aguantamos poco. Atrás queda aquel año, que se celebró en el Retiro, al poco de llegar yo a Madrid, en el que participé como voluntario. Ahora me limito a ser socio económico de visita relámpago y eso me deja un regusto un poco amargo.